La Sociedad General de Autores y Editores ha impuesto hoy una multa a unos camioneros que descargaban su vehículo en la aduana Finlandia-España.

Mapa que muestra el lugar de los hechos

“No nos lo esperábamos – declara Fulgencio Fernández, uno de los afectados – Nosotros creíamos que habían descubierto nuestro cargamento ilegal de órganos, pero ¿esto? Esto es una vergüenza para los honrados camioneros de este país”.

El propietario del Grupo GAES (empresa que controla, entre otros, la SGAE), Alejandro Sanz ha declarado que no esta dispuesto a consentir que personas como estas se aprovechen de descargas ilegales para forrarse a consta de los pobres artistas internacionales. “Me veo con el agua al cuello – dice Sanz – Antes podía permitirme un Ferrari al día, ahora, con las descargas de Internet a penas tengo para pagar a mis criados”.

La empresa de los camioneros, una humilde mafia de traficantes de órganos ha interpuesto una demanda contra la SGAE por uso indebido del poder.

Alejandro Sanz

Alejandro Sanz burlándose de los camioneros mientras eran ahorcados

 

Lamentablemente para ellos, el juez que instruía el caso ha sido multado por la SGAE por usar una frase que se parecía a una dicha en “Los Intocables de Elliot Ness” y condenado por el tribunal de la Haya a 8 meses de cárcel.

Ante la ausencia de magistrado, la administración jurídica ha designado al Juez Antonio Sanz, quien ha alegado no estar emparentado con el demandado. Después de estas declaraciones, los dos camioneros han sido condenados a muerte en la horca y ajusticiados (después de abonar la multa, por supuesto).